top of page
Buscar

Un día, tus hijos te van a agradecer lo que hiciste hoy... O al menos eso esperamos.

  • Foto del escritor: Diana Vargas
    Diana Vargas
  • 11 ago
  • 2 Min. de lectura
ree

Ser mamá o papá muchas veces se siente como caminar por un sendero invisible, uno en el que vas construyendo el camino mientras caminas. No hay instrucciones, no hay garantías, y la mayor parte del tiempo, las decisiones que tomas hoy parecen invisibles.


Pero un día, tus hijos van a mirar atrás y van a ver todo lo que hiciste por ellos. Todo lo que decidiste, incluso cuando era difícil. Y ese día, te lo van a agradecer. O al menos eso queremos pensar.


Puede que hoy te sientas estresada por las cuentas, por el tipo de comida que le das, que si es orgánico o no, las actividades extraescolares, hacer homeschooling o llevarlo a la escuela tradicional. Que no sepas si esa inversión en su educación va a valer la pena. Que abrir una cuenta de ahorro te parezca un paso pequeño.


Quiero que sepas que cada decisión que tomas con amor y conciencia, por pequeña que parezca, está construyendo algo: estabilidad, confianza, protección, oportunidades.


Porque no se trata sólo de darles lo mejor hoy. Se trata de asegurarte que también tendrán lo mejor mañana.

Recuerda...Nadie nace sabiendo planear. Y no pasa nada si no sabías cómo hacerlo antes. Nadie te dio una guía para ser madre o padre. Nadie te explicó lo que implica educar, criar, proteger.


Pero puedes aprender. Puedes decidirte hoy a tomar el control de la alimentación, ejercicio o tus finanzas. A pedir ayuda para proteger y darle a tu familia una buena calidad de vida.


Tus hijos quizán no noten hoy que hiciste un presupuesto para poder inscribirlos en ese curso. O que cancelaste una compra impulsiva para ahorrar para su universidad. Pero un día, cuando vean todo lo que tuvieron, y lo que no les faltó, van a entender. Y no solo lo entenderán, lo valorarán.


En ver por tu familia con visión no significa perfección. Significa intención. Significa que cada decisión que tomas tiene un "para qué".


Muchas veces repetimos patrones porque no sabemos cómo hacer algo diferente. Pero hoy puedes tomar otra dirección.


Puedes enseñar con el ejemplo. Puedes demostrar que se puede vivir con orden, con plan, con intención. Y puedes, desde ya, invitar a tus hijos a formar parte de ese cambio.


Tal vez hoy hablen de monedas y domingos. Pero mañana hablarán de inversiones, de ahorro, de proyectos.


Planear no es solo por ellos. Es también por ti. Porque vivir sin sobresaltos, sin el miedo constante de "y si pasa algo...", te devuelve la energía, el sueño, la calma.

Tener un plan no elimina los retos. Pero te da herramientas para enfrentarlos con serenidad.


Y si no sabes por dónde empezar... Aquí estoy. Porque nadie tiene que hacerlo sola.


Te puedo acompañar a construir un plan de vida y de ahorro adaptado a ti. A tu ritmo. A tu realidad. Sin presión. Sin juicio. Con claridad.

Empieza hoy. Por ti. Por ellos.


Un día, tus hijos te van a agradecer lo que hiciste hoy.


¿Lista para empezar a planear con claridad? Agenda una sesión gratuita conmigo y comencemos juntas este camino.



 
 
 

Comentarios


bottom of page